17 momentos dorados en el jardín de los deseados.
Ese día amaneció lluvioso hasta conocer el resplandor de tus
ojos.
La tarde se tornó en primavera, como haces con tu vida
entera.
Los sueños se vieron cumplidos y el corazón henchido.
La noche perdió su oscuridad constante, tu destello es
incesante.
La vida me regaló tu esencia no la concibo sin tu
existencia.
Los colores, la música, las flores... ¿Qué tienen de majestuoso
sin el brillo de tus ojos?
No hay comentarios:
Publicar un comentario