Crepúsculo indiscreto en un mar de vericuetos.
Me alejo y te convulsionas con las olas peleonas.
Me agarro al arrecife, donde los corales dicen.
Me tumbo en mar abierto, los tiburones rodean mi cuerpo.
Me traslado al inframundo, visualizando el confín del mundo.
Abro los ojos y respiro, mi corazón late conmigo.