Cómo
no amar tu dulzura temprana aquella que me nutre todas
las
mañanas.
Cómo
no adorar tu talante tranquilo aquel que controlas por
el
mejor camino.
Cómo
no querer tu forma de actuar si haces que el mundo parezca
genial.
Cómo
no chiflarse por esos verdes ojos aquellos que al mirarlos
roban mis antojos.
Cómo
no sucumbir a tu noble corazón que hace de mi vida un regalo
de
Amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario